Afrontamos un escenario con un aumento de liquidez y un dificultoso quiebre de stock producto de los movimientos económicos globales, que nos proyecta un panorama complejo de cara a 2022. Sin embargo, los clientes estarán más dispuestos a ser parte de aquellas marcas que logran adaptarse a las nuevas señales del entorno, capaces de configurar respuestas ágiles a sus nuevas demandas, poniéndolos en el centro de su toma de decisiones, garantizando el correcto tratamiento de sus datos personales.